Un policía visita a un bombero, Ferathi, tras un incidente con piedras. A las 19.30 horas, el policía tiene que marcharse. Sin embargo, es retenido por el bombero que le empuja contra la pared y le desnuda porque tiene un fuego dentro que pretende apagar. Comienza entonces una sesión de sexo caliente entre los dos guapos. Una vez que se han quitado los uniformes, los dos franceses se la chupan en el suelo. Después, el bombero se folla al joven policía en todos los rincones de su despacho. Empiezan en la silla, pasan al escritorio y terminan donde todo empezó: en el suelo. El policía gime a cada embestida de su colega. No se puede negar que el bombero sabe cómo utilizar su gran manguera. Al final, el joven policía descarga su carga sobre el vientre de su colega, sin dejar de ser arado por él. Cuando las virilidads del orden cooperan, ¡la fusión puede ser muy caliente!
