Desde el otro lado de la pared, Maxim, un jovencito de pelo oscuro, muestra su polla fina, tonificada y jugosa utilizando una pantalla muy bien colocada para realizar un sensual baile para su compañero de cama rubio. Allí tumbado, se pone cada vez más duro y Maxim agita su enorme y gruesa polla hasta que sale, fingiendo no haberse dado cuenta de lo que hacía, hasta que se le cae la toalla y su erección, aún furiosa, vuelve a quedar al descubierto. Arrastrándose a lo largo de la cama hacia la entrepierna de Maxim, Lee se apresura a devorar su polla, recorriéndola entera y adorando toda la zona, desde sus pequeñas y pesadas pelotas hasta su recortado pubis y más allá, pero sin olvidar nunca su polla perfecta. Después de jugar un rato con sus pollas, Maxim empuja a Lee a la cama, le levanta una pierna y hace lo que cualquier jovencito cachondo haría cuando tiene un agujero rosado a la altura de su polla. Hundiendo su polla desnuda profundamente en su lubricado compañero, follan duro, bolas adulando contra el culo hasta que Lee se retuerce, sobre su espalda y las piernas están en el aire, con los pies casi en la cámara, la gruesa polla de Maxim deslizándose sin esfuerzo hacia adelante y hacia atrás hasta que ambos chicos se corren tan duro, Lee se queda saturado, goteando en jugo, ¡justo como nos gusta!