James Huck acaba de despertarse y todavía tiene una erección que no se le quita. Le a. Se dirige a la cocina, donde Pedro Ramos se está relajando. Al entrar en casa de Pedro, James se da cuenta de que tiene una polla abultada escondida en los pantalones. Le entra un hormigueo de imaginárselo. Para mejorar las cosas, empiezan a remojarse profundamente, creando el ambiente para una experiencia muy cruda. Los chicos se quitan primero las camisas, luego los pantalones, y es James quien empieza a chupársela primero a Pedro. Cambian, y es entonces cuando James se pone cachondo de cojones, ¡haciendo que su polla se ponga dura como el hierro! Los tíos se lo llevan al salón, donde Pedro monta a James al estilo vaquero, luego al revés, luego a lo perrito antes de que James se corra en Pedro, ¡su juguete del amor impecable!