Estos dos jóvenes bomberos gays están acostumbrados a apagar incendios. Pero cuando uno de ellos tiene el culo en llamas, la única solución será rociarlo abundantemente con esperma para calmarlo. Los chicos se desnudan, revelando sus cuerpos delgados y ardientes, chupándose la polla antes de que el de abajo se dé en bruto. Después de ser bien sodomizado tendrá la cara cubierta de esperma y sentirá el calor irse, calmado y sembrado.