Estos dos jóvenes pertenecen a una familia rica. Pasan sus vacaciones solos en una gran villa, y sobre todo en la piscina. Los días son largos y no hacen otra cosa que sexo durante todo el día. Podemos entenderlo... Son jóvenes, guapos, tienen los huevos llenos de semen, les gusta chuparse la polla unos a otros, lamerse el culo y meterse las pollas duras en sus agujeritos. Después de todo, ¿no es la mejor manera de pasar las vacaciones? Solas y entregadas la una a la otra con sus almas y sus cuerpos. Sexo todo el día y cena romántica por la noche. ¡Eso es una buena vida!