Un joven se ha unido a un equipo de fútbol no por su amor al juego, sino por el placer de ver a todo el equipo en el vestuario. Le encanta el olor de los chicos sudorosos desnudándose en las duchas... Sus compañeros de equipo se han dado cuenta de cómo les mira todo el tiempo... ¡Ahora van a darle lo que quiere!